A pesar de que España se encuentre muy lejos de los niveles de Alemania o Francia en cuanto a productividad, nuestro país registró el año pasado un pequeño crecimiento de la misma que marcó un punto de inflexión respecto a años anteriores lo que le hizo llegar a recortar un 5% con Alemania.
Después de los años de crisis que ha atravesado España parece que ahora comenzamos a pasar por un proceso de recuperación económica, se ha producido el crecimiento del PIB que ha vuelto a apoyar la creación de empleo, aunque también se puede apreciar una mejora de la actividad, incluso en periodos con expansión de empleo.
Analistas Financieros Internacionales en un informe reciente aseguran que «el incremento de productividad permitió mantener la competitividad de la economía en 2016. Los costes laborales unitarios reales disminuyeron levemente gracias a la contención salarial y al moderado incremento de la productividad. Como resultado, las exportaciones de bienes españolas alcanzaron máximos históricos y la aportación del sector exterior al crecimiento del PIB fue de 0,4 puntos.»
Aun así la productividad en España sigue estando muy por debajo de la media del área euro y de los principales países de la región. Si comparamos a España con Alemania notamos que existe una reducción mayor del 5% desde el 2007 hasta que ha llegado al 25%. Si comparamos a España con Francia la diferencia ha disminuido de un 4% hasta el 33%.
A pesar de estas ganancias, la productividad en España sigue estando por debajo de la media del área euro y de los principales países de la región. La brecha con respecto a Alemania se ha reducido en más de un 5% desde 2007 hasta situarse en el 25%. Con respecto a Francia, la diferencia ha disminuido un 4% hasta el 33%.La comparativa entre países además refleja que las ganancias de productividad han sido limitadas y queda un gran margen de mejora para que podamos acercarnos a los países más productivos de la Unión Europea.
El informe llamado «Acumulación y productividad del capital en España» asegura que «a productividad del trabajo ha progresado un 33% en las últimas tres décadas, pero es un resultado pobre porque se utiliza mucho más capital humano».
En las décadas de los 80 y los 90 la principal causa de pérdida de eficiencia relativa de economía española era la productividad del trabajo, pero en el siglo XXI, el bajo aprovechamiento del capital acumulado es la clave. Después del año 2000 la baja productividad del capital en España explica el 61% de la divergencia y la productividad total con EE.UU.
